Por muy extraño que parezca el día de hoy Lunes, me tomé el día sólo para mi, deje mi celular en mi casa de acampar y fui a una caminata con mi Tropa, lo padre de esta caminata es que iríamos a una montaña porque ahí íbamos a hacer más actividades.

Así que comenzamos a caminar aproximadamente a las 7 de la mañana hacia la montaña, era muy temprano pero aún así estábamos ansiosos por ya irnos, durante todo el camino estuvimos platicando y disfrutando del bello paisaje, ¡el cual es grandioso!

Durante el camino ya casi al llegar me comenzó a doler la rodilla así que procuraba no ir tan rápido para no lastimarme, fue entonces que al llegar a la cima decidí ir a la enfermería, y me dieron una noticia que cambiaría por completo mi día… me tenían que mandar al Hospital del campamento porque mi rodilla estaba muy inflamada y me la tenían que checar, en su comienzo fue muy triste pero al subirme a la ambulancia (que por cierto era una ambulancia militar), yo no sabía que mi aventura apenas comenzaba. Yo no sabía a dónde iría o que pasaría lo único que sabía era que iría a que revisaran y para esto tuve que tomar dos ambulancias para llegar hasta el hospital.

Todo el camino iba observando por dónde íbamos, que pasábamos e iba checando todo. Cuando por fin llegue y me revisaron, lo único que pasó fue que me dieron un poco de analgésico y ya eso fue todo, me dijeron que yo ya estaba lista para a seguir adelante con mis actividades, entonces como mi Tropa estaba en la montaña y yo en la Base del campo lo que hice fue ir a ver los Stands donde aprendí muchas cosas interesantes que eran completamente nuevas para mí.

Este día fue completamente diferente al día que esperaba y aún así lo disfruté al máximo, cada momento, cada instante fue único y especial.

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