En cada evento Scout internacional hay un “Día de la Cultura”. El Jamboree Scout Mundial no es la excepción, y de hecho, ha hecho algo que nunca antes había visto. La demostración cultural ha durado todo el evento, y con cosas que nunca antes había visto. El ambiente en cada país es muy acogedor, y hay músicos tocando en vivo todos los días. Una de las cosas que más me llamo la atención fue el café en Turquía:
Como una persona muy amante del café, me vi obligado a probarlo. En mi opinión, es muy bueno, pero también es uno de los más fuertes que he probado.
Algo que también me llamo mucho la atención en Turquía fueron sus pinturas. El proceso es diferente a todo lo que alguna vez había visto. Primero, se “derrama” sobre el agua gotas de pintura, que se esparcen pero no se mezclan.
Una vez la pintura está sobre el agua, con una varilla de metal delgada se le da la forma, y después se pone sobre ella una pagina de papel. La página absorbe la pintura, y después se retira. La página queda así:
Otra experiencia extremadamente interesante fue leer la historia de los scouts Checos. Durante las muchas guerras y conflictos, el movimiento fue prohibido e incluso muchos scouts murieron.
Otra cosa muy llamativa del World Point es el museo de los Jamborees. Este museo muestra la historia de cada uno de los Jamboree que han ocurrido a lo largo de ha historia. Tienen uniformes, bordones y hasta las insignias de cada uno. Hasta de el primero.
Una de las cosas que más me llamo la atención de el museo fue el sombrero de BP, usado por BP.
En Bélgica, había una guitarra y un piano. Después de 2 semanas sin tocar, no me resistí.
Lo más lindo de todo el World Point, es el hecho de que sin salir del Jamboree se puede conocer la cultura de cada país que participa.